Pues bien, aqui una buena enseñanza y una buena manera de actuar y orar ante el Santísimo.

Muchas veces nos hemos encontrado ante la inquietud de cómo orar y qué actitud tener cuando estamos ante la presencia de Nuestro Señor Jesucristo en la adoración Eucarística.

Un sacerdote exorcista de Canadá dió una charla en la cual explicó la importancia de hacer adoración al Santísimo por lo menos una hora por semana.
Y para las personas que sufren enfermedades fuertes o tienen problemas con alguno de los miembros de sus familias, él dijo que irse a hacer adoración media hora o una hora por día, no sólo cura; sinó que transforma todo. Es lo máximo. El sacerdote también dijo cual es la mejor forma de hacer adoración…
Ejemplo:
Los primeros 15 minutos ir frente a Jesús en la Eucaristía, mostrarnos frente Él y decirle que vienes para amarlo y que quieres dejarte Amar por Él.

Los siguientes 15 minutos Darle gracias por todo:
Por la vida
Por el hogar
Por lo que tenemos de comer
Por el trabajo o los negocios
Por el agua que tenemos para bañarnos. Etc…
Muchos, dijo, ya no damos gracias porque no valoramos lo que tenemos, pero siempre miramos lo que no tenemos.

Después 15 min de reparación
Reparando y entregando por nuestros familiares que no lo conocen, no le aman…
Reparación por las cosas terribles que están pasando en el mundo: Los abortos, las idolatrías , las matanzas, los adulterios, etc…

Y los últimos 15 minutos son para hacer las peticiones
Mencionó que él daba los tiempos de 15 minutos como una guía, pero no necesariamente tienen que ser esos tiempos.
También dijo que quien tiene una enfermedad como el cáncer, si va al Santísimo a hacer adoración, no baja de peso, no se le cae el cabello, ni sentirá dolores fuertes. Dijo que de un Santísimo expuesto salen rayos de Jesús y las personas van sanando y liberándose.

Ahora bien, ya sabiendo está orientación, disfruta de poder estar en Adoración Eucarística, pues Nuestro Señor Jesucristo se alegra cada vez que vas a visitarlo.

Alabanzas de Desagravio

Bendito sea Dios.

Bendito sea su santo Nombre.

Bendito sea Jesucristo, verdadero Dios y verdadero Hombre.

Bendito sea el nombre de Jesús.

Bendito sea su Sacratísimo Corazón.

Bendita sea su Preciosísima Sangre.

Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar.

Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito.

Bendita sea la excelsa Madre de Dios, María Santísima.

Bendita sea su Santa e Inmaculada Concepción.

Bendita sea su gloriosa Asunción.

Bendito sea el nombre de María Virgen y Madre.

Bendito sea San José, su castísimo Esposo.

Bendito sea Dios en sus Ángeles y en sus Santos.

Amen.

Un paso al día 👣